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CARNE ENLATADA

La carne enlatada proporciona alimentos ricos en proteínas de alta calidad que son estables a temperatura ambiente.


Los productos cárnicos enlatados incluyen músculos enteros, guisos de carne, fiambres, salchichas, salsas con trozos de carne y productos en pasta.


El enlatado de carne es un gran método para preservar y extender la vida útil y esencialmente incluye tres operaciones principales: llenado de latas, agotamiento y tratamiento térmico.


Los productos se preparan sellando herméticamente (evitando el escape o la entrada de aire) el producto en un recipiente (generalmente latas de acero recubiertas de estaño) y se procesan térmicamente para destruir los microorganismos de descomposición. Los productos cárnicos enlatados, también denominados productos procesados térmicamente, pueden agruparse en dos categorías: productos esterilizados y productos pasteurizados. Los productos esterilizados deben calentarse para alcanzar una temperatura interna de al menos 101 ° C (temperatura de calentamiento de 121 ° C) y son estables en almacenamiento. En los productos cárnicos enlatados comercialmente estériles, todos los microorganismos viables, incluidas las esporas, se destruyen o se vuelven inactivos. Los productos enlatados se procesan en una olla de retorta que funciona a una presión de 12 a 15 psi. Recientemente, las latas de metal han sido reemplazadas por bolsas de retorta, es decir, bolsas flexibles laminadas de múltiples capas que pueden resistir el procesamiento a alta temperatura y presión. Estas bolsas laminadas actúan como barrera a los gases y la humedad. Las bolsas de retorta laminadas con papel de aluminio cuestan menos y son más livianas, lo que permite una fácil distribución y comercialización con un tiempo de procesamiento más rápido.

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